Pineda de la Sierra
Y de nuevo regresamos a los polvorientos caminos. Nosotros, nómadas del viento, somos sombras, un espejismo en un lago de aguas cristalinas, el aire fresco de la mañana. No puedes vernos pero, gracias a ellos, existimos.
Y de nuevo regresamos a los polvorientos caminos. Nosotros, nómadas del viento, somos sombras, un espejismo en un lago de aguas cristalinas, el aire fresco de la mañana. No puedes vernos pero, gracias a ellos, existimos.
